Siempre he intentado dartelo todo. Sí, todo. Todo lo que querías, todo lo que perdiste, todo lo que soñabas...Todo, sólo para hacerte feliz...Pero detrás la felicidad siempre hay gente que corre para alcanzarla.
He intentado muchas veces decirte todo lo que pasa por mi cabeza cuando estabas conmigo. Decirte que me da igual lo tonto que sea el tema de conversación, que siempre me hacías sonreir, que siempre que te hablo intento mirarte a los ojos, a tus ojos azules/verdes/grises, y no puedo. Decirte que pienso en ti toda la noche y que si no lo hago no consigo dormir, que la melodía mas increible que escuche en mi vida son la de los latidos de tu corazón...Pero siempre que lo intento mi mente se divide en dos y ante la duda...prefiero callarme.
He intentado, todos los días, escribirte los textos mas hermosos que hayas podido leer. Con las palabras adecuadas, con buena letra y con sinceridad en cada una de las líneas...Pero cuando cojo el bolígrafo y abro mi libreta se me escapan las palabras.
Y parece mentira que intente olvidarte y no lo consiga, que intente no hablar de ti todo el día y no lo consiga, que intente no buscar tu olor en mis sabanas, no escuchar tu voz en mi cabeza entre la gente cuando voy sola por la calle...y no sea capaz.
Y por mucho que intente separarte de mi alma...tu te vas con ella, porque mi alma y tu sois lo mismo.
Sólamente mis manos pueden encajar en las tuyas. Sólo mis sueños provienen de tu sonrisa.