se han pasado por aqui...

iberia

domingo, 29 de mayo de 2011

Hay que saber distinguir entre querer y amar. Cuando quieres a una persona, le tienes un gran cariño o afecto, y una gran confianza. Esa persona ocupará gran parte de tu alma y tu corazón, pues para ti será muy importante. Cuando esa persona sufre, tu le das tu apoyo y la comprendes, pero no compartes su dolor.
Cuando amas a alguien sientes que tu corazón va mas rápido a su lado, y las horas se pasan como si fueran minutos cuando estas junto a él y un sentimiento cálido te inunda por dentro. Te sientes vacía cuando no está, y sueles observarlo de reojo y te sorprendes mucho cuando él te pilla in fraganti, giras la cabeza en redondo, e intentas hacer como si nada. Porque por él lo darías todo, hasta la vida, y aún así sería poco. Cuando amas a alguien, este se convierte en el centro de tu vida, como si antes tu corazón nunca hubiera latido, como si nunca antes hubieras estado viva del todo. Te faltaba ese algo... te faltaba él.
Cuando lo ves sufrir se te encoge el alma, y es como si tu sufrieras con él, aunque su sufrimiento nada tenga que ver contigo, porque te encanta verlo sonreir, te encanta su sonrisa, te encanta simplemente él, y no puedes permitir verlo de esa forma...
Yo quiero con toda mi alma a muchas personas, ¿pero amar? amar solo amo a una una con todo mi corazón, una muy especial.
El amor y el cariño a veces se confunden porque van de la mano, ya que son sentimientos muy similares, pero jamás serán lo mismo. Tu puedes querer y amar a una persona, puedes querer a muchísimas ¿pero amar? solo amas a una.
Muchas veces, jugamos con los sentimientos de la gente sin darnos cuenta, cambiamos demasiado rápido de parecer, demasiado rápido de objetivos, y con ello dañamos a mucha gente de nuestro alrededor, y muchas veces sin importarnos si quiera... deberíamos tener más en cuenta los sentimientos de la gente, porque quizá hoy no eres tú el perjudicado, pero puede que algún día lo seas...

No hay comentarios:

Publicar un comentario