
Es imposible para ti y para muchas más personas. Muy poca gente es capaz de controlarlo, casi nadie. Y esas personas son afortunadas en algunos momentos, pero en otros son las que peor lo pasan.
Muchas veces pueden estar tristes, y a la vez riéndose y hablando de tal manera que no puedes darte cuenta de su sufrimiento. Lo ocultan tan bien que no eres capaz de sospechar nada, no puedes imaginarte ni lo más mínimo de lo que le está pasando y por tanto no reciben ayuda.
Pero otras veces viene estupendamente, porque ¿cuántas veces te han contado algo muy triste, que afecta mucho a una persona, y tú, que estás tan contento por aquello tan bonito que te pasó a ti, eres incapaz de ocultar tu felicidad? Y tú rebosas alegría por todos lados, se la contagias a todo el mundo, pero por alguna extraña razón no puedes llegar a aquella persona que tan mal lo está pasando y tampoco puedes ocultar tu sentimiento de alegria. Te resulta frustrante no poder ponerte en su lugar y compartir su sentimiento.
Aunque al fin y al cabo, tú causarás menos daño. Sin querer, contarás la verdad y no podrás ocultar nada por mucho tiempo y esto hará que aquello malo que hiciste duela menos.
"Una mirada vale más que mil palabras"
No hay comentarios:
Publicar un comentario